Llevamos mucho tiempo en silencio, pero es difícil resumir la actualidad municipal cuando hay tanto que mirar y comparar con el pasado… Bueno, la verdad es que no tanto. Tal vez sea ese el problema.
Desde nuestra semi-desconexión municipal, como ciudadanos de a pie no hemos visto muchas diferencias significativas. Puede leerse por ahí acerca de una auditoría hasta ahora no ejecutada y de la cual dudan con motivos razonables algunos grupos de vecinos. Además el consistorio y sus “presupuestos participativos” parecen obviar las inversiones en las urbanizaciones, hasta ahora relegadas a sus propios presupuestos o a Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, dedicando presupuestos como el PRISMA exclusivamente al casco urbano. Aunque en un momento u otro las usemos todos, afectan directamente a tan solo la mitad de la población de Valdemorillo. Es esa mitad también a la que le perjudican los experimentos con el transporte público dentro y fuera de la almendra central. Se demostró claramente que el doble sentido mediante el uso de semáforos era un completo fracaso, dejando además sin cobertura a zonas realmente significativas. No obstante este tema vuelve a debate durante este mes de noviembre… Miedo me dan las posibles “soluciones” y su influencia en los pequeños comerciantes del centro y de la periferia.
Por otra parte vemos cómo por fin se va a eliminar un impuesto de podas absolutamente injusto, dado que quienes lo pagamos tenemos desde el principio un nivel de servicios inferior al que tienen, por ejemplo, en el casco urbano, independientemente de los metros cuadrados de nuestra residencia. Mientras se establece un nuevo y dudoso punto limpio en función del domicilio de algunos concejales, al final es la economía de la chatarra la que nos saca las castañas del fuego… Este servicio no paga ni cobra impuestos.
Cabe señalar también cómo el comercio local parece emerger gracias a una buena gestión basada en escuchar por fin las necesidades de los empresarios. Esperemos que al menos esto continúe. En Educación y Cultura, por desgracia, no cabe decir lo mismo. Tenemos una concejalía en prácticas que aún no parece ser consciente ni de las necesidades ni del modo de subsanarlas. La Participación Ciudadana sigue la misma regla. Parece mentira que haya aún colectivos que, legalmente constituidos, no tengan acceso a la información municipal, teniendo que ir inevitablemente al Registro Municipal si quieren estar informados.
Hasta ahora sólo podemos sumergirnos en un gran mar de dudas, algunas recientes y otras muy antiguas:\r\n- ¿Por qué deben las urbanizaciones financiar con nuestros impuestos el desarrollo del casco urbano sin recibir ayudas para su propia economía?
– ¿Cuánto aporta el Ayuntamiento de Navalagamella a las infraestructuras de Cerro Alarcón I mientras cobra sus impuestos, delegando otras tasas y servicios al Ayuntamiento de Valdemorillo?
– ¿Por qué las nuevas tecnologías nos permiten ver desde casa los plenos municipales en directo pero nunca después, cuando hay muchos ciudadanos que estaban en horario laboral imposibilitándoles el acceso?\
– ¿Cuándo va a coger el nuevo consistorio las riendas del gobierno en lugar de “parchear” las resoluciones anteriores?
– En definitiva, ¿cuándo vamos a percibir los ciudadanos que realmente ha habido un cambio en Valdemorillo?
El próximo jueves 19 toca pleno. Veremos si logramos responder a alguna de estas cuestiones…
NOTA ADICIONAL: Espero sinceramente que lo ocurrido en París el pasado viernes no rompa el clima de convivencia que se ha logrado durante años con la población magrebí en nuestro municipio. Creo que todos hemos sentido el mismo dolor e indignación ante la sinrazón.