En 2011 Acción Votante concurrió por primera vez a las elecciones municipales de Valdemorillo presentando un programa electoral que recogía, a nuestro modo de ver, propuestas cuidadosamente elaboradas, realistas y cuyo fin último era la mejora de nuestro municipio y de la calidad de vida de sus vecinos. Por aquel entonces nos pareció tan obvio que la forma de llevar a la práctica todas esas pretensiones sería siempre desde la honradez y la total transparencia, que no lo reflejamos de una forma explícita en dicho programa electoral. Quizá fue porque no somos políticos “profesionales”, porque somos ciudadanos corrientes a los que sólo mueve el deseo de conseguir lo mejor para nuestro pueblo, sacando el máximo partido de los recursos disponibles, sin desviarlos en ningún momento hacia intereses particulares.
Lamentablemente, a lo largo de estos años y mucho más en estos últimos meses, nos estamos dando cuenta de que lo normal para muchos, lo inherente al desempeño de la función pública es la prevaricación, el cohecho, la malversación, la corrupción en definitiva. Tristemente, estamos conociendo que para un alto porcentaje de la clase política, llenarse los bolsillos con el dinero de los contribuyentes es una prerrogativa más de haber “ganado” un cargo público en unas elecciones.
No sabemos si en Valdemorillo se esté produciendo esa situación, es difícil determinarlo. Sí parece tenerlo muy claro la nueva formación política PANV, Partido Anticorrupción de Valdemorillo, al que damos la bienvenida como a cualquier nueva iniciativa democrática que pudiera surgir, aunque parece algo triste que un partido político nazca con la lucha contra la corrupción como único punto de su programa, por muy noble que sea este empeño. En Acción Votante pensamos que el fin de la corrupción pasa por llevar a la práctica desde la máxima trasparencia en la gestión, la honradez y el deseo de servir, todas aquellas iniciativas necesarias para el buen funcionamiento y la progresiva mejora del municipio, que es al final lo que los ciudadanos necesitan y desean.
Hace pocas fechas, a través de televisión, hemos asistido al “examen” a que el Partido Popular somete a los que van a pasar a desempeñar un cargo público al amparo de sus siglas. A todas luces parece una pantomima de cara a la galería, que en ningún momento garantizará la honradez del futuro cargo. Lo que no se ve por ninguna parte son medidas más radicales que de verdad supusieran un freno a esa lacra social que es la corrupción. Por ejemplo, ¿Y si por ley un partido político tuviera que responder subsidiariamente por los desmanes y delitos que sus cargos electos cometieran en el desempeño de sus funciones? ¿Cuántos partidos se presentarían entonces a unas elecciones? También parecen muy recomendables otras medidas como crear una lista pública con aquellos contratistas para los que se pruebe cualquier intento de soborno o corrupción en el acceso a contratas del Ayuntamiento, de forma que dichas empresas o autónomos queden excluidos de futuros procesos de contratación.
Para que quede constancia de lo obvio que sigue siendo para nosotros que la confianza de los electores es algo que de ninguna forma se puede traicionar, Acción Votante presentará estas y otras iniciativas anticorrupción como parte de su programa electoral en las próximas elecciones municipales de 2015.